Fuente: Offshore Energy. Sara Kosmajac. 11/02/2025
Las compañías navieras que buscan reducir los costos de combustible y reducir las emisiones recurren cada vez más a pinturas antiincrustantes a base de silicona, pero sus desafíos de aplicación y su rendimiento variable en el mundo real exigen una consideración cuidadosa, dice un informe.

En su nuevo informe titulado “Una descripción general de las pinturas antiincrustantes a base de silicona”, la organización sin fines de lucro con sede en Atenas, Maritime Emissions Reduction Center (MERC), ha destacado que los sistemas de revestimiento de casco “avanzados”, las pinturas antiincrustantes a base de silicona han ganado más atención como una opción para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), ya que se pueden aplicar durante los diques secos.
Según MERC, los recubrimientos antiincrustantes a base de silicona funcionan creando una superficie ultra suave y antiadherente con baja energía superficial, evitando la acumulación de microincrustaciones (limo) que, si no se eliminan conducen a un aumento de GEI de hasta un 25-30% dependiendo del tipo de barco, la velocidad y las condiciones del mar.
La eliminación del lodo también se ha relacionado con el ahorro de combustible: en un estudio de enero de 2025, investigadores del Real Instituto Tecnológico KTH (KTH) sueco descubrieron que un “barco cubierto con una fina biopelícula puede experimentar un aumento de hasta el 80% en el consumo de combustible”.
En este sentido, los recubrimientos antiincrustantes que detienen la formación de biopelículas presentan una opción alentadora para la industria naviera, algunos fabricantes afirman que estas soluciones muestran el potencial de ofrecer hasta un 10% de ahorro de combustible, reveló MERC.
Además de esto, como se sostiene en el análisis, a diferencia de las pinturas antiincrustantes, los recubrimientos a base de silicona no se degradan con el tiempo y no dependen de biocidas.
Los beneficios enumerados de las pinturas antiincrustantes coinciden con las conclusiones de la Organización Marítima Internacional (OMI). En concreto, la OMI ha revelado en un estudio de noviembre de 2021 que eliminar el lodo de los cascos de los barcos podría reducir las emisiones de GEI hasta en un 25% lo que hace que las pinturas sean especialmente atractivas; sin embargo según MERC, las pinturas antiincrustantes a base de silicona requieren una selección cuidadosa según el tipo de embarcación, el perfil operativo y las rutas comerciales, ya que su rendimiento puede variar mucho dependiendo de la exposición del casco y el estrés mecánico.
Como se explicó, los recubrimientos son particularmente vulnerables a daños en áreas de alto impacto como la proa bulbosa, la parte superior de la bota, el fondo plano y la hélice, donde el contacto con anclas, defensas o bloques de atraque puede comprometer su efectividad; para equilibrar el costo y la durabilidad, MERC sugirió que los operadores consideren esquemas híbridos que combinen silicona y sistemas antiincrustantes aplicando cada uno donde sea más adecuado.
En cuanto al tipo de buque, el análisis destacó que los buques de mayor velocidad (por ejemplo, portacontenedores, transbordadores de carga rodada) son los que más se benefician de los recubrimientos de silicona. Se entiende que los buques de menor velocidad (por ejemplo, graneleros) tienen una “eficacia reducida “, ya que los recubrimientos de silicona requieren un cierto nivel de flujo de agua para auto limpiarse. Los grandes buques transportadores de crudo (VLCC) muestran un éxito “moderado ” con recubrimientos de silicona, pero los esquemas híbridos se
describen como “más prácticos ” para ellos.
MERC ha destacado que los revestimientos de silicona y de liberación de suciedad dura cuestan más que las soluciones convencionales. La organización ha compartido que la pintura tiene un precio elevado, sino que existen requisitos más estrictos para la preparación y aplicación en la superficie.
Para maximizar los méritos, MERC plantea que el monitoreo del rendimiento y la gestión de la bioincrustación desempeñarán un papel “clave “, así como el mantenimiento del recubrimiento en condiciones óptimas y la garantía del rendimiento durante todo el ciclo de atraque.